México lindo, sabroso y picante

Una de las ventajas de la diáspora venezolana, es que nuestra familia está dispersa por varios países del mundo y afortunadamente, uno de ellos es ¡México!

Este año 2020 lo comenzamos viajando y en esta segunda entrega les queremos contar nuestras experiencias con la cultura gastronómica del pueblo mexicano, que no solo es picante, si no sabrosa y rica en matices.

La comida mexicana reúne tradiciones gastronómicas tanto mesoamericanas como europeas y es tan especial que el 16 de noviembre de 2010, su gastronomía fue reconocida como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Los criterios por los cuales fue aceptada incluyen: antigüedad, continuidad histórica, capacidad de crear identidad cultural común, la creación colectiva, la relación con el sistema cultural del país, con lo ritual, con el calendario ceremonial. Es decir, la cocina como un acto eminentemente cultural. ¿No les parece algo impresionante?


Su historia gastronómica se remonta aproximadamente 10,000 años atrás, a la época en que se estima fue domesticado el maíz para convertirse en el cultivo que sería la base alimentaria de las culturas mesoamericanas. Los pueblos indígenas que habitaron el territorio tuvieron una dieta basada principalmente en vegetales, maíz y chile. Al chile y maíz se asociaban otras especies de no menor importancia, el jitomate, el cacao, el aguacate, la calabaza, el nopal y la vainilla.

Actualmente es considerada como una cocina de gran influencia barroca, resultado de un mestizaje culinario, y representación de la visión que los mexicanos tienen del mundo. Sus ingredientes principales son: maíz, chile, cereales, verduras, nopales, chocolates, tomates, arroz, cebolla, jitomates, frijoles, carnes rojas, etc.

Lo rico de viajar con la familia, es que podemos aprovechar sus conocimientos de lugares típicos y deliciosos para conocer la verdadera comida tradicional y pasear por mercados y ventas de ingredientes que se utilizan en la vida cotidiana del país. Y es que en México todos es tan rico, colorido, lleno de historia y cultura y la gente es tan amable, que provoca regresar siempre!

Tuvimos la suerte de hacer un espectacular recorrido por Oaxtepec, Taxco, Querétaro y San Miguel de Allende. Pueblos mágicos y hermosos que nos permitieron conocer mejor la cultura y gastronomía de esta maravillosa región y descubrir que más allá del guacamole, los tacos y las quesadillas, están las salsas y muchas otras delicias que se conocen menos fuera del país.

México es un importante centro de domesticación del chile y actualmente cuenta con 64 variedades que utilizan en sus platillos más emblemático. Frescos, secos, ahumados y hasta toreados, los chiles son una parte importantísima de su comida y su cultura. El picante de este producto es el aporte que le da todo el sentido a la sazón.

Y así, aprovechamos nuestro paseo para contarles sobre algunos de sus chiles más populares:

El chile jalapeño no es muy picante, mide unos diez centímetros de largo y su color va del verde brillante al rojo una vez que se encuentra maduro. Los jalapeños en escabeche son muy utilizados para aderezar tortas y sándwiches, pero estos chiles también se agregan completos a muchos guisos para darle sabor al caldo. También se llaman chiles cuaresmeños, porque esta forma de consumo es muy popular durante la cuaresma.

El chipotle no es más que el chile jalapeño después de pasar por un proceso de secado y ahumado. El chipotle pica más que un jalapeño fresco y tiene un color marrón con tonos rojizos. Las salsas de chipotle son sumamente aromáticas y son un ingrediente insustituible en gran variedad de guisos, incluyendo algunos moles. Tal vez el platillo más asociado con el chipotle son las bolitas de carne en un caldo de jitomate y chipotle. Otro platillo que no podría vivir sin el chipotle es la tinga, carne desmenuzada en una salsa de chipotle, jitomate y cebolla.

El chile habanero proviene de las tierras bajas de la cuenca Amazónica y se dice que llegó a Yucatán gracias al comercio. Este chile, cuando madura, es color naranja-rojizo y tiene textura suave. No suele utilizarse seco, sino  más bien crudo, asado o cocido. Es el chile más picante de los que se consumen en México y es ideal para la preparación de salsas ácidas o con bases frutales, por ejemplo con mango o tamarindo. Es el complemento perfecto de la comida yucateca, especialmente para los tacos de cochinita pibil.

El chile poblano es de tamaño grande, color verde oscuro y piel brillante. Es la variedad más grande de chile que se consume en el país. La manera más popular en la que se utiliza es relleno. Un ejemplo es el famoso plato conocido como chile en nogada. Otra manera de prepararlo es cortándolo en tiras y preparando las famosas rajas con crema y queso. Al secarse, se convierte en el chile ancho y también forma parte de los ingredientes del delicioso mole poblano.

El chile serrano es la segunda variedad más producida en el país después del jalapeño. Este pequeño chile la mayoría de las veces se consume verde pero también maduro, cuando se torna rojo. Se puede comer crudo, cocido, asado o frito. Proviene de las regiones de la sierra de los estados de Puebla, Veracruz, Sonora y México. Se utiliza bastante en la salsa verde.

El chile guajillo es de color café a rojizo y generalmente se utiliza seco. Va perfectamente con los guisos, salsas y hasta en el mole. De igual manera, es utilizado en la confección de adobos y es la base de muchísimos de los platos de la comida mexicana. Existen tres variantes del guajillo: el guajillo chico, ancho y el puya. En cada uno el nivel de picante es diferente.

El chile pasilla, negro o de chilaca se consume seco, tiene coloración oscura y es bastante picante. En la comida mexicana se utiliza bastante en sopas y salsas al integrarlo picado a muchos guisos. Lo podemos encontrar en tiendas de productos mexicanos, entero , o en polvo. Se cultiva en los estados de Jalisco, Nayarit y Michoacán.

Foto extraida de la pagina Facebook de Abarrotes Doña Cuca

Y por último, ¡descubrí que los chiles o ajíes cambian de nombre luego de pasar por el proceso de secado! Véanlo en el dibujo anterior.

La riqueza de la comida mexicana se debe en parte al uso de estos chiles y sus sabores variados e increíbles. No tengamos miedo de probarlos y experimentar con ellos.

 

 

 

 

 

 

Referencias
-De México para el mundo: Chiles, ajíes, pimientos y especias, disponible en: https://www.proceso.com.mx/411976/de-mexico-para-el-mundo-chiles-ajies-pimientos-y-especiasttps://www.youtube.com/watch?v=rGnKuFRyTIo

-Mini guía para entender las variedades de chiles más importantes de México, disponible en: hhttps://matadornetwork.com/es/mini-guia-para-entender-las-variedades-de-chiles-en-mexico

– Estos son los 6 tipos de chiles más usados en la cocina mexicana, disponible en: https://www.vix.com/es/imj/gourmet/170123/estos-son-los-6-tipos-de-chiles-mas-usados-en-la-cocina-mexicana

-Tipos de Chiles Secos, disponible en: https://www.mexicoenmicocina.com/tipos-de-chiles-secos/

-La comida mexicana “pica y sabe”, disponible en: https://www.telemundo47.com/noticias/mexico/la-comida-mexicana-sabores-principales-composicion-historia-tradicion/68343/

La picardía de los picantes…chiles que encienden pasiones

Ahora que comienzo a plasmar estas palabras es que soy consciente del porqué se me ha hecho tan difícil escribir este post y describirles las diferentes sensaciones que experimento cuando pruebo pimiento, chile o ají picante, como le decimos en Venezuela…

Cuando pruebo un picante el calor invade todo mi rostro, comienzo a sentir palpitaciones en la lengua, en toda mi boca, la salivación se hace más profusa, mi cuerpo se estremece, corren por mi piel toda una sensación de cosquilleos que se van transformando en emociones fascinantes e intensas que entre bocado y bocado van despertando suspiros y jadeos por un ardor y dolor masoquistas. Cuando de pronto va emergiendo de mis entrañas un profundo placer que se dibuja en mis labios como una pícara sonrisa, el deseo se intensifica y mi cuerpo pide más, debo complacerlo…

Y es que los chiles o pimientos son de ese tipo de alimento que puede hacer volar tu imaginación y sobrepasar cualquier expectativa. Ellos tienen el enorme poder de moverte entre sensaciones y emociones tan intensas y contrastantes que hacen que literalmente tu cuerpo y tu cerebro exploten y fluyan dentro de ti un sinfín de sustancias que a su vez van desencadenando una sensación tras otra, como una especie de cascada que nada la detiene. ¿Les suena conocido? ¿Les ha pasado algo similar?

Debido a todo esto y mucho más es que los pimientos son y serán siempre una de las especias más consumidas y amadas a nivel mundial. Por supuesto, no todos son fanáticos de estos ardientes frutos. El gusto por ellos es tan variado como extensa es la gama de pimientos que existen y así de amplio es el abanico de grados de picor que cada especia pueda generar.

Estas diferencias en el nivel de picor, se deben principalmente a un componente llamado capsaicina, cuya concentración no solo dependerá de la constitución genética de la planta, sino también de las condiciones en las que crece o es cultivada, debido a que el calor y la sequía aumentan la concentración de la capsaicina en sus frutos. De igual forma el grado de madurez de estos determinará su picor, consiguiéndose el máximo en el momento en que el fruto verde empieza a cambiar de color.

La capsaicina es la responsable de que muchos amen a los pícaros pimientos y muchos otros huyan de su feroz efecto. Este compuesto hace que nuestro cuerpo experimente sensaciones tan agudas que son interpretadas literalmente como dolor. Lo cual se debe a que todos los mamíferos tenemos en la boca y en la lengua unas proteínas que están involucradas en la transmisión y modulación del dolor, llamadas receptores potenciales transitorios (TRPV1, Transient Receptor Potencial).

Cuando ingerimos picantes las moléculas de la capsaicina encajan perfectamente en estos receptores y se transmite la señal al cerebro de que nuestra boca está ardiendo. Estos receptores también detectan los cambios de temperatura en la piel y en las membranas, así que responderán a estímulos de dolor mecánicos, químicos o de temperatura, por lo que dependiendo de cómo se activan los terminales, pueden causar dolor adherente, ardiente, agudo y casi cualquier otro tipo de dolor que haya experimentado o pueda imaginar (Neurogastronomy de Gordon M. Shepherd).

Ante estas señales de explosión de dolor severo el cuerpo responde liberando adrenalina, esto a su vez produce un incremento de energía acelerando las pulsaciones de nuestro corazón, aumentando la presión sanguínea y trasladando mayor cantidad de sangre a nuestros músculos principales. Lo mismo que ocurre cuando encaramos situaciones de riesgo o miedo. Incluso se dice que si la intensidad de picor es muy potente pudiéramos experimentar elevación de endorfinas. Estas como opiáceas naturales nos generan un efecto analgésico en el cuerpo y hasta una sensación de felicidad. Quizás esto es lo que nos lleva a la dualidad de amor y dolor que nos enceguece y nos hace ir por más…

¿Y cómo sabemos cuál es el grado de picor al que nos enfrentados con cada pimiento?

Así como les comentamos más arriba, el abanico de grados de picor es muy amplio, por ello en 1912 Wilbur Scoville desarrolló  un método sensorial para clasificar la intensidad de los pimientos o picantes llamada Escala de Scoville. Las unidades de la misma (SHU por sus siglas en inglés), indican la cantidad de Capsaicina presente en determinado fruto y esta va de 0 a 15 millones, siendo cero el pimiento verde o morrón y el máximo valor la propia capsaicina. Debido a que esta escala era poco precisa, por tener un componente subjetivo, se creó el Método Gillett que mide directamente la cantidad de capsaicina mediante una técnica denominada cromatografía líquida de alta resolución (high performance liquid chromatography, por sus siglas en inglés HPLC), pero la Unidad Scoville siguen siendo la unidad de medición actual.

Para este post quisimos hacer una pequeña experiencia personal con los pimientos que encontramos habitualmente en los mercados de Montréal. ¡Nos atrevimos a probar 9 de ellos!!! (se consiguen algunos más y otros en su forma deshidratada, que dejaremos para otra oportunidad).

Y a continuación organizamos nuestros pimientos, según nuestra apreciación en escala de más picante a menos picante y su valor en unidades Scoville. ¡Les cuento que el Jalapeño y el Serrano me encantaron!

Luego de nuestra degustación, tuvimos que recurrir a algunas de estas recomendaciones: para poder calmar el color, picor, ardor o calor generado por alguno de los chiles o pimientos que sientan muy picosos, no acudan al agua como una opción aunque sea esto lo primero que les provoque, debido que la capsaicina no es soluble en agua, así que no hará gran diferencia. En su lugar se recomiendan ingerir alguna bebida láctea (leche, yogurt, crema agria), dado que la caseína rodea la molécula, volviéndola ineficaz, una bebida alcohólica fría para calmar la sensación o incluso también se dice que si «distraemos» al cerebro con algun alimento que tenga cierta textura como el pan, la percepción del efecto picante disminuirá.

Así mismo, una vez que sus manos entran en contacto con la capsaicina de cualquier chile, deben asegurarse de no tocar sus ojos, nariz u otras zonas sensibles, ya que el efecto puede ser muy pero muy desagradable e irritante. Es por ello que muchas personas por precaución emplean guantes para manipularlos y así protegen sus manos. Además se recomienda, antes de emplear cualquier pimiento, retirar la placenta o membrana blanca que envuelve las semillas.

Y ustedes, qué nos pueden contar sobre su experiencia con los pimientos, son de los que los aman o de los que ni se les ocurre probarlos y huyen despavoridos ¡Ja ja ja!

Referencias
– ¿Cómo se mide el picor de los chiles?, disponible en: http://elholandespicante.com/noticias/guia-de-picante-para-chiles-y-pimientos/
– Hot chile peppers on the Scoville scale, disponible en: https://www.thespruceeats.com/hot-chile-peppers-scoville-scale-1807552
– Propiedades medicinales de la capsaicina, disponible en:
https://www.botanical-online.com/capsaicina.htm
– Escala scoville, disponible en: https://es.wikipedia.org/wiki/Escala_Scoville
– Picor de los chiles, disponible en: http://www.seminis.mx/blog-picor-de-los-chiles/
– ¿Qué le pasa a tu cuerpo cuando comes chile picante y por qué puede ser bueno para tu salud? Disponible en, https://www.bbc.com/mundo/noticias-39230926
– ¿Por qué puede ser placentero el dolor?, disponible en:
https://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/10/151004_vert_fut_dolor_placentero_yv
– The capsaicin receptor: a heat-activated ion channel in the pain pathway, disponible en:
http://www.hysafe.org/science/eAcademy/docs/Nature_v389_p816to824.pdf
– La Capsaicina, disponible en:
http://revistas.pucp.edu.pe/index.php/quimica/article/viewFile/7590/7835